Los vuelos transatlánticos son una ocurrencia común hoy en día, con más de 2500 cruces del océano Atlántico todos los días, se han convertido en parte del movimiento normal de personas entre el continente Americano y el Europeo.

Pero para las tripulaciones que operan esos miles de vuelos, no tienen nada de común y continúan siendo una operación demandante y potencialmente peligrosa donde equipos con experiencia son necesarios. A continuación les vamos a explicar cómo se prepara una tripulación para un vuelo transatlántico. Después de un buen descanso, la tripulación normalmente llega al Aeropuerto al menos 2 horas antes para comenzar con el plan de vuelo.
Las rutas para “cruzar el charco” se llaman NATs o North Atlantic Organized Track System, y necesitamos seleccionar una para poder iniciar nuestro vuelo. Estas rutas, que son como una autopista en el cielo con varios carriles, son creadas por especialistas de tráfico aéreo todos los días en Prestwick, Escocia y Gander, Terranova. Estos “tracks” cambian todos los días ya que dependen del clima, y proporcionan la ruta más eficiente para cruzar el océano.
Para planear el vuelo, se toma el NOTAM del track del día, este viene marcado con las primeras letras del abecedario (A, B, C, D, E) para tracks con dirección al oeste y las últimas letras del abecedario (U, V, W, X, Y, Z) con dirección al este.
Cada aerolínea solicita el Track que le dé la mejor economía de combustible. Para los cruces hacia Europa, el control de tráfico en Gander será el que asigne la ruta. Después de seleccionar nuestro track, que en este caso seleccionaremos el Track Uniform, este es confirmado por control o reasignado en caso de que haya congestión en la ruta.

Media hora antes de la salida del vuelo, la tripulación contacta al control de tráfico aéreo para recibir su autorización de ruta. Lo que para el océano Atlántico, únicamente cubre las porciones domésticas del vuelo, por lo que no sabremos qué track nos será asignado hasta que no estemos en vuelo.

Hasta hace unos años, todas las autorizaciones se hacían por medio de radio, hoy en día se entregan por medio del ACARS, que es una especie de WhatsApp para aviones y se recibe por medio de mensaje en la pantalla de la computadora de vuelo. La autorización se solicita aproximadamente 90 minutos antes de alcanzar nuestro punto de cruce oceánico.